Damir llegó hasta el lugar de donde procedía la señal.Un demonio de alas escamosas y de color azul trataba de atacar a un grupo de adolescentes. Como todo Demonio, y al igual que los Ángeles, el ser oscuro que se erguía a unos metros de Damir tenía la apariencia de un ser hermoso. Sus facciones eran perfectas, simplemente, bellísimas... Tan bellas como malignas... Y para peor, los Demonios se valían de su belleza como un arma más para atraer a los humanos a sus redes... Y se sabía bien, más de un humano había caído en la trampa.
El Demonio gruñió, ofendido.
-Yo soy Caleb, Noble entre los míos, supremo ante los humanos... y tú, Angelucho, no eres nada a mi lado...- una voz gutural, que no coincidía con el rostro perfecto y glorioso que al que pertenecía, retumbó en el lugar.
Damir respiró lentamente, como conteniéndose de no actuar precipitadamente.
-Chicos, vayanse... De veras, no querrán quedarse a ver lo que aquí ocurrirá...- dijo, con voz fría y monocorde.
Caleb entonces se movió hacia Damir, dejando a los humanos de lado.
Los jóvenes, aprovecharon y huyeron, antes de que las cosas empeorasen...
-Bien... Que empiece la diversión...- provocó Caleb- Al menos, gastaré en ti mi energía...
Damir volvió a sonreír... era típico de los Demonios hacer gala de su fuerza y poder.
Él prefería mantener perfil bajo y medirse en la lucha misma... Y mal no le había ido, una sola vez había perdido la batalla, y llevaba viviendo ya varios milenios...
Caleb saltó sobre Damir, dando así el primer paso en la pelea.
El impacto del puño de Caleb en la espalda de Damir fue profundo y doloroso...
El Demonio trataba de herir las alas, ya maltrechas y sin recuperar totalmente, de Damir. Era una táctica que usaba generalmente... Un Ángel con las alas lastimadas no puede huir volando. Y además, era más divertido para Caleb ver a morir lentamente a esas criaturas celestiales que solo le provocaban furia y enojo...
Nada había en los Ángeles que él pudiese envidiar. Caleb se creía superior y perfecto...
Pero Caleb estaba tan encerrado en su mundo narcisista y egocéntrico, que no vio cunado Damir, luego de recibir el golpe, giró sobre sí mismo y extrajo de su chaqueta un espada de cristal...
La sangre oscura y tóxica de Caleb empapó el suelo cuando Damir, luego de acuchillar el estómago del Demonio, retorció la espada y la sacó velozmente, dispuesto a seguir atacando.
Caleb aulló de dolor y con su garra izquierda perforó el hombro derecho de Damir, con el cual el Ángel controlaba la daga...
Damir saltó hacia atrás, retraído por el dolor punzante que recorría su cuerpo. Caleb había tenido la consideración de cubrir su mano con su propia sangre, y al dar el golpe, las toxinas del fluido habían entrado en la herida, envenenando a Damir. Ese tipo de heridas requerían cierto tiempo para sanar...
Damir, entonces, recurrió a actuar como su instinto le impulsaba: abrió sus alas y las agitó con fuerza. El viento generado hizo volar cuanto había en la vereda, cestos de basura, la tierra misma... y entre la nube de polvo, mientras Caleb trataba de ubicarle, Damir levantó la espada con su mano sana y con todas sus fuerzas saltó sobre el Demonio y le degolló...
Para cuando el viento calmó, el cuerpo sin vida de Caleb yacía en el cuerpo...
Damir, agitado, se preparó para incinerarle, pero una voz llamó su atención...
-¿Damir?- la voz melodiosa y angelical de Sasha atravesó a Damir con fuerza.
El Ángel Caído giró su rostro y pudo observar a pocos metro de su posición a Sasha, tan hermosa como siempre... la única diferencia radicaba en sus alas negras...
Detrás de Sasha, un joven miraba la escena con miedo en los ojos. Seguramente era Noah, el marido de Milena...
-¿Qué haces aquí?- preguntó Sasha, sin darle tiempo a Damir para reaccionar- Maldito... destruiste a uno de mis jefes....
-Sasha... ¿acaso no te hace feliz verme?
-No, no me importa...
-Pero... tu... y yo....
-Pero nada, sigues siendo tan tonto como siempre. Tanto poder derrochado, ¡qué despilfarro! Tendrías que unirte a nosotros...
-No, regresa tú conmigo, todos estarán más que felices de darte la bienvenida de nuevo.
-Ja!, jamás... fui tonta antes, ahora, todo está claro... aprovecho mis dones, los uso a mi antojo... no como tu... ¡Qué despilfarro!- repitió Sasha, burlonamente.
Damir entrecerró los ojos y negó varias veces con la cabeza, tratando de expresar claramente lo que sentía y pensaba...
-Puedo desgarrar tu alma y destrozarte, pero no soy como tú, no lo haré... Puedo envolver tu corazón entre mis manos y con una simple presión de mis dedos, aplastarlo sin remordimientos, pero no soy como tú, no lo haré...- comenzó a decir el Ángel Caído al Ángel Negro que, hacia tiempo había sido el amor de su existencia y ahora le observaba con odio...
Damir sonrió, abrió sus manos lentamente, mientras sus garras crecían y tomaban fuerza. Comenzó a caminar hacia el Demonio, mientras le miraba fijamente. Solo sería cuestión de minutos, ese ser despreciable y sanguinario dejaría de existir...
El Demonio giró para mirar a Damir, que caminaba implacable hacia él. El Ángel Caído aprovechó que el Demonio centraba su atención fuera de los humanos y gritó:
-Chicos, vayanse de aquí... esto se pondrá complicado...- invitó, mientras tronaba los dedos de su mano y se paraba en pose de ataque...El Demonio gruñió, ofendido.
-Yo soy Caleb, Noble entre los míos, supremo ante los humanos... y tú, Angelucho, no eres nada a mi lado...- una voz gutural, que no coincidía con el rostro perfecto y glorioso que al que pertenecía, retumbó en el lugar.
Damir respiró lentamente, como conteniéndose de no actuar precipitadamente.
-Chicos, vayanse... De veras, no querrán quedarse a ver lo que aquí ocurrirá...- dijo, con voz fría y monocorde.
Caleb entonces se movió hacia Damir, dejando a los humanos de lado.
Los jóvenes, aprovecharon y huyeron, antes de que las cosas empeorasen...
-Bien... Que empiece la diversión...- provocó Caleb- Al menos, gastaré en ti mi energía...
Damir volvió a sonreír... era típico de los Demonios hacer gala de su fuerza y poder.
Él prefería mantener perfil bajo y medirse en la lucha misma... Y mal no le había ido, una sola vez había perdido la batalla, y llevaba viviendo ya varios milenios...
Caleb saltó sobre Damir, dando así el primer paso en la pelea.
El impacto del puño de Caleb en la espalda de Damir fue profundo y doloroso...
El Demonio trataba de herir las alas, ya maltrechas y sin recuperar totalmente, de Damir. Era una táctica que usaba generalmente... Un Ángel con las alas lastimadas no puede huir volando. Y además, era más divertido para Caleb ver a morir lentamente a esas criaturas celestiales que solo le provocaban furia y enojo...
Nada había en los Ángeles que él pudiese envidiar. Caleb se creía superior y perfecto...
Pero Caleb estaba tan encerrado en su mundo narcisista y egocéntrico, que no vio cunado Damir, luego de recibir el golpe, giró sobre sí mismo y extrajo de su chaqueta un espada de cristal...
La sangre oscura y tóxica de Caleb empapó el suelo cuando Damir, luego de acuchillar el estómago del Demonio, retorció la espada y la sacó velozmente, dispuesto a seguir atacando.
Caleb aulló de dolor y con su garra izquierda perforó el hombro derecho de Damir, con el cual el Ángel controlaba la daga...
Damir saltó hacia atrás, retraído por el dolor punzante que recorría su cuerpo. Caleb había tenido la consideración de cubrir su mano con su propia sangre, y al dar el golpe, las toxinas del fluido habían entrado en la herida, envenenando a Damir. Ese tipo de heridas requerían cierto tiempo para sanar...
Damir, entonces, recurrió a actuar como su instinto le impulsaba: abrió sus alas y las agitó con fuerza. El viento generado hizo volar cuanto había en la vereda, cestos de basura, la tierra misma... y entre la nube de polvo, mientras Caleb trataba de ubicarle, Damir levantó la espada con su mano sana y con todas sus fuerzas saltó sobre el Demonio y le degolló...
Para cuando el viento calmó, el cuerpo sin vida de Caleb yacía en el cuerpo...
Damir, agitado, se preparó para incinerarle, pero una voz llamó su atención...
-¿Damir?- la voz melodiosa y angelical de Sasha atravesó a Damir con fuerza.
El Ángel Caído giró su rostro y pudo observar a pocos metro de su posición a Sasha, tan hermosa como siempre... la única diferencia radicaba en sus alas negras...
Detrás de Sasha, un joven miraba la escena con miedo en los ojos. Seguramente era Noah, el marido de Milena...
-¿Qué haces aquí?- preguntó Sasha, sin darle tiempo a Damir para reaccionar- Maldito... destruiste a uno de mis jefes....
-Sasha... ¿acaso no te hace feliz verme?
-No, no me importa...
-Pero... tu... y yo....
-Pero nada, sigues siendo tan tonto como siempre. Tanto poder derrochado, ¡qué despilfarro! Tendrías que unirte a nosotros...
-No, regresa tú conmigo, todos estarán más que felices de darte la bienvenida de nuevo.
-Ja!, jamás... fui tonta antes, ahora, todo está claro... aprovecho mis dones, los uso a mi antojo... no como tu... ¡Qué despilfarro!- repitió Sasha, burlonamente.
Damir entrecerró los ojos y negó varias veces con la cabeza, tratando de expresar claramente lo que sentía y pensaba...
-Puedo desgarrar tu alma y destrozarte, pero no soy como tú, no lo haré... Puedo envolver tu corazón entre mis manos y con una simple presión de mis dedos, aplastarlo sin remordimientos, pero no soy como tú, no lo haré...- comenzó a decir el Ángel Caído al Ángel Negro que, hacia tiempo había sido el amor de su existencia y ahora le observaba con odio...
-Puedo valerme de mil excusas, convencerte de una tonta idea y llevarte a mi guarida, donde soy capaz de cometer atrocidades y generarte miles de tormentos. Pero no soy como tú, no lo haré...- continuó - Puedo dejar que mi impulso me guié, que la noche me lleve a hacer cosas que a la luz del ni siquiera pensaría posibles. Pero no soy como tú, no lo haré... Puedo mofarme de tu padecer, reírme a norte y sur por tu desgracias. Pero no soy como tú, no lo haré...
Sasha se detuvo en seco de su amague de atacar a Damir. Le miró fijamente, tratando de dejar de lado los recuerdos que tenía de ese Ángel con el que había compartido y vivido tantas cosas...Damir sonrió sin alegría:
-¿Ves? Ambos nos parecemos, podemos causar dolor y arrancar la vida de alguien si lo deseamos. Pero hay una diferencia muy grande entre ambos: tú fuiste más lejos, destrozaste almas, aplastaste corazones, engatusaste y atormentaste a otros. Yo, en cambio, soy consiente de mi poder, pero no lo uso. No puedo hacer eso, lastimar así a alguien, destrozar así a otro ser. No soy como tú... y ahora has llegado más lejos todavía, me atacas a mi, a quien mas te he amado y solo por placer... Yo no podría hacer eso nunca, no podría lastimarte, aun cuando hagas de mí un muerto en vida, no pienso rebajarme a tu nivel, no pienso convertirme en un monstruo como tú... Soy un Ángel Caído, perdí mis alas por el amor que te tenía, por el dolor que me causó saber que te habías pasado al otro bando, que ahora eres un Ángel Negro... Y seré paciente, trabajaré arduamente, algún día, ganaré el cielo de nuevo. Ya mis alas están sanando... tú puedes intentarlo también...
Sasha giró su rostro, como si las palabras de Damir fuesen una bofetada a sus creencias.
-Bueno... supongo que tu silencio lo dice todo... no tengo fuerzas ahora para luchar contra ti... mátame si lo deseas... sino, simplemente me iré... pero ten en cuenta algo, cuando te encuentre nuevamente, me haré de tu vida, pagarás todo el daño que estás haciendo a la humanidad... ejerceré mi rol de Ángel y haré cumplir la Ley Celestial...- anunció Damir, la furia le consumía.
Ver a Sasha en esa situación era desastroso para él...
Pero Sasha no habló ni se movió... ni intentó lastimar o tocar a Damir.
Damir entonces, abrió sus alas y emprendió vuelo una vez más...
Atrás quedaron Sasha y Noah, que se había mantenido al margen.
Estaba a punto de amanecer cuando Damir llegó a la vieja iglesia donde recurría cada vez que estaba herido...
Debía reponer energías, buscar a Milena, armar un plan...
-¿Ves? Ambos nos parecemos, podemos causar dolor y arrancar la vida de alguien si lo deseamos. Pero hay una diferencia muy grande entre ambos: tú fuiste más lejos, destrozaste almas, aplastaste corazones, engatusaste y atormentaste a otros. Yo, en cambio, soy consiente de mi poder, pero no lo uso. No puedo hacer eso, lastimar así a alguien, destrozar así a otro ser. No soy como tú... y ahora has llegado más lejos todavía, me atacas a mi, a quien mas te he amado y solo por placer... Yo no podría hacer eso nunca, no podría lastimarte, aun cuando hagas de mí un muerto en vida, no pienso rebajarme a tu nivel, no pienso convertirme en un monstruo como tú... Soy un Ángel Caído, perdí mis alas por el amor que te tenía, por el dolor que me causó saber que te habías pasado al otro bando, que ahora eres un Ángel Negro... Y seré paciente, trabajaré arduamente, algún día, ganaré el cielo de nuevo. Ya mis alas están sanando... tú puedes intentarlo también...
Sasha giró su rostro, como si las palabras de Damir fuesen una bofetada a sus creencias.
-Bueno... supongo que tu silencio lo dice todo... no tengo fuerzas ahora para luchar contra ti... mátame si lo deseas... sino, simplemente me iré... pero ten en cuenta algo, cuando te encuentre nuevamente, me haré de tu vida, pagarás todo el daño que estás haciendo a la humanidad... ejerceré mi rol de Ángel y haré cumplir la Ley Celestial...- anunció Damir, la furia le consumía.
Ver a Sasha en esa situación era desastroso para él...
Pero Sasha no habló ni se movió... ni intentó lastimar o tocar a Damir.
Damir entonces, abrió sus alas y emprendió vuelo una vez más...
Atrás quedaron Sasha y Noah, que se había mantenido al margen.
Estaba a punto de amanecer cuando Damir llegó a la vieja iglesia donde recurría cada vez que estaba herido...
Debía reponer energías, buscar a Milena, armar un plan...
Hola!!!!
ResponderEliminaraqui dejo mi capitulo nuevo...
Dedicado a Danlin, Nana, Leo, Allison, Mer y todos aquellas personas que leen mi blog y dejan comentarios tan lindos, que me impulsan a seguir escribiendo...
Espero les guste...
Esta muy muy bueno el capi, te felicito escribes muy bien y me tienes pegada con la historia, pero me dio pena la reaccion de sasha al ver a damir :( pero seguire atenta para ver que pasa, espero ansiosa el proximo capi.... xau cuidate que te valla bien
ResponderEliminarBien, ya lei este tambien, gracias por la decicacion, como siempre me gusto mucho. ^^
ResponderEliminarEspero la proxima!, ya que ahora tendras mas tiempo XD
De Danlin, TKM!
Pd: MAP!
hi hi ..
ResponderEliminarwiii stuvo bueno el capi jeje
pobercito de Damir T_T
graxias por la dedicacion jeje
bueno sperare el prox capi
bueno besotes bye
Sigue mi Erzengel tú historia es freca, nueva e ingeniosa.
ResponderEliminarAh! Sus alas rotas ahora están más pronto sanarán pues solo el amor regenerarlas podrá, ese amor que tú nos das, el amor de un ángel de verdad. Besotes
lo adore, quedo hermosoooooooooooooo!!! dios, me da pena el pobre Damir, tan hermoso y esa sacha lo que le hace :S
ResponderEliminarhummmm, será que somos tan tontos que rechazamos lo bueno por el placer de lo mundano..
ResponderEliminarPobre Damir..
Sigo en mi maratón