-Deja de mirarme así -gruñó Camille, incómoda y nerviosa.
-¿Así cómo? -Joaquín hizo una mueca. Eso de que lo acusaran sin razón nunca le había gustado.
-Como me miras ahora. Como si lamentaras todo lo que vivimos y quisieras volver el tiempo atrás y resarcirte de tus errores.
-Pero...
-¡Pero nada! -Camille parecía fuera de control. Había dado rienda suelta a su enojo contenido una vez más- Sigues siendo el mismo inmaduro de siempre.
Sin decir otra palabra, dio media vuelta y se fue.
-Pero no quiero volver el tiempo atrás -murmuró Joaquín-. Sólo quiero pasar el resto de mi vida contigo.
Camille nunca sabría aquello. Ella no tenía oídos para los sentimientos de Joaquín. Ya no.
Nos leemos pronto!
¡Auuuu, mi vida! Mi parte trágica y dramática te aclama en serio Erze. Estas son las historias que más me gustan. Me encantan los personajes atormentados por sus propios actos; dentro de la condición humana es algo muy interesante de profundizar.
ResponderEliminarSaludos ^^