Elevó sus manos al cielo, reclamando con furia y desesperación el volver a verlo al menos una vez más.
Cayó de rodillas al suelo y gritó con todas sus fuerzas. No podía terminar así. Simplemente, no era posible. De ninguna manera.
¿Quién era dueño y señor para manipular su vida y alejarla de cuanto amaba? ¿Quién jugaba a ser titiritero y tiraba de los hilos que la sostenían?
Era injusto, muy injusto. Terrible, doloroso y profundamente cruel. No lo merecía. Nadie merecía algo así.
¿Qué culpa guardaba al haber sido capaz de observarlo a la luz del día? ¿Cómo podía ella llegar a saber que estaba prohibido mirar siquiera la luz que él emanaba al caminar?
Maldito fuera el día en que se enamoró un ángel. Maldito el día que los separaron y maldita su existencia al descubrirse lejos de quien amaba y sin modo alguno de recuperarlo.
No pensaba darse por vencida. No aún. Lo suyo no era una historia con final trunco, nunca lo sería.
Nos leemos pronto!
Breve pero intenso y completo :) Me encantaría saber más de la historia de ella y el ángel, y qué decide hacer al final. Me ha gustado mucho!
ResponderEliminar