Encontrar a Hollie parecía por demás difícil, pero usando nuestro poderes, Maku y yo bien podíamos encontrar a otro de los nuestros... La esencia de Queila se apreciaba fácilmente si prestabamos atención.
Nos encontramos de pronto corriendo por pleno bosque.
¿Qué clase de cita era ésta?...
Al acercarnos a un lugar más abierto, comenzamos a movernos aún con más sigilo.
Hollie estaba allí, sentada sobre el tronco de un árbol caído, con sus ojos vendados y atada de pies y manos.
Karim también estaba... Desmayado en el suelo, podía ver una gran herida en su cabeza. El olor a sangre fresca llegó a mis narices. En el suelo, la mancha de sangre crecía paulatinamente.
Junto a ellos, dos hombres hablaban en murmullos.
Uno era de contextura formida y alto, sus cabellos rubios brillaban platinados a la luz de la luna. El otro individuo era más delgado y de estatura media.
Yo los conocía a los dos...
-Maldición... Esos son dos miembros de la guardia... Alistair y Narhen... Si ellos están aquí, los demás no tardarán en llegar...- murmuré y mi compañero asintió en silencio.
Él ya había luchado contra Alistair hacía muchos años atrás y había vencido de milagro, pero no había sido capaz de matarle... Ahora, el destino los enfrentaba nuevamente. Y sabía bien que mi compañero cumpliria esta vez su objetivo.
-Bien... Yo me haré cargo de Narhen...- dije, adelantandome- Debemos sacar a Hollie de aquí y al humano también, no podemos dejarlo sólo....
Me disgustaba, pero no era capaz de irme con Hollie y dejar a Karim así como estaba.
En silencio, mi compañero se movió veloz y generó un sonido en la otra punta del bosque para llamar la atención de Alistair. Logró su cometido fácilmente... Unos instantes más tarde, Alistair se internaba entre los árboles curioso.
Bien, a mi me quedaba Narhen...
Sabía que no podía usar mis poderes con Hollie tan cerca. Entonces, sería una lucha cuerpo a cuerpo.
Narhen revisaba unos papeles cuando le sorprendi desde un costado. Mi puñetazo fue directo a su mandibula y Narhen se vio en el suelo sin percatarse de lo que ocurría.
-Reuen...- dijo al fijar su vista en mi- Nos volvemos a encontrar...
-Eres un idiota si piensas que permitiré que la lastimes...- dije, poniendome en guardia para luchar.
-Pues... Si ella muere nuestro líder regresa... Debe morir, no hay opción...- replicó, sonriente.
Bufé enojado y de un movimiento rápido levanté a Narhen por los aires sosteniendolo por el cuello. Podía ahorcarlo con mis manos y sería algo muy sencillo en verdad...
Pero cuando estaba a punto de hacerlo, algo me golpeó con fuerza y me vi obligado a soltar a Narhen.
Era Maku quién estaba sobre mi, aplastandome contra el suelo.
Alistair reía mientras se acercaba.
-Niño... Eres débil, como siempre...- dijo, con mirada asesina- Por eso mereces morir.
Maku gruñió y saltó sobre su oponente, mientras yo me ponía en pie y buscaba a Narhen con la mirada.
El muy maldito estaba junto a Hollie, haciendo un conjuro.
¡Diablos! Si mataba al idiota no tendría tiempo para salvar a Hollie...
Gracias a todos los cielos, Maku le devolvió el golpe a Alistair, lanzandolo sobre Narhen. Con el conjuro a medio decir, sería sencillo ayudar a Hollie.
-Vete... Yo me haré cargo... Llévate a Hollie y has que sane. Yo mataré a Narhen y veré de ayudar al humano y llevarlo a un lugar tranquilo...- dijo mi amigo, mientras caminaba hacia nuestros enemigos.
Pude comprobar que Alistair estaba muerto. Una gran herida se veía en su pecho... Le faltaba el corazón, Maku había sido preciso en su ataque...
Cargue en brazos a Hollie y comencé a correr, debía revertir pronto el proceso del hechizo de Narhen...
Llegué a mi casa y usé mis dones para limpiar el conjuro que había sobre Hollie.
Esa parte resultó fácil, el problema serían las horas que eran necesarias para que Hollie se recuperara por completo.
¿Y cómo explicarle luego a Karim lo sucedido?... Talvez generando un falso recuerdo en él... Ya se vería más tarde...
Entonces pensé en llevar a Hollie a su hogar y dejarla en su habitación. Sus padres y hermanos a esa hora ya dormían y Hollie sólo precisaría mucho descanso para sanar por completo.
Tomé nuevamente a la joven entre mis brazos y adquiriendo la apariencia de una simple sombra comencé a correr.
Acomodé a Hollie en su cama y constaté que todos dormían...
Un sonido extraño me hizo poner en guardia, pero me tranquilicé al ver a Maku sentado en el marco de la ventana.
Sus ropas estaban bañadas en sangre y se notaba exhausto...
-Veo que ella está mejor...- dijo, sonriendo- El muchacho está camino a su casa. Le llevé hasta su auto y le hice creer que Hollie había regresado a su hogar porque se sentía mal... Cosa que es verdad... También me hice cargo de los cuerpos de Narhen y Alistair, sólo quedaron cenizas...
Asentí en silencio, mirando a Hollie dormir.
Habían sido muchas cosas para un sólo día y me preocupaba lo que ella recordaria a la mañana siguiente.
-Me iré a descansar un poco... Enviaré a alguien para que te apoye desde afuera por cualquier eventualidad...- susurró Maku antes de desaparecer entre las sombras de la noche.
Suspiré y me acomodé en una silla junto a la joven humana que llevaba el alma de mi querida Queila.
De pronto Queila me hacia más falta de lo habitual...
La extrañaba demasiado a veces. Sobre todo en situaciones en las cuales precisaba hablar con alguien y dejar de lado mi armadura de guardián y miembro de la Orden de la Flor de Liz...
Me hacia falta ahora... Más que nunca...
La noche se me pintaba demasiado larga esta vez...
Wow!
ResponderEliminarEspero que Hollie lo recuerde, porque si despues de todo lo que paso no se acuerda siquiera seria una lastima para Reuen, ademas ella tiene derecho a saber, aunque sea de sus propios errores...
Danlin, TKM!
MAP!