Capítulo 21: Tatuado el Deber

En la casa de DK, el grupo entero discute aún por el descubrimiento de los Demonios.
-Es claro que piensan quitar del medio a todos sus oponentes. Los Demonios no somos sus unicos enemigos...- murmura Narim.
-No, no lo son... También estan los Cazadores que suelen revelarse y dudar de las ordenes que reciben, como Karol, que se unio a Sharem- replica DK- Y los humanos que se atreven a dar muerte a algun Angel también estaran en la mira. Macu e Irene son las unicas sobrevivientes de este grupo...
Mariola, con un rastro de dolor en su ojos, desvia la mirada de sus amigas hacia el Imparcial y cuestiona:
-¿Por qué ahora? Siempre han existido adversarios asi... ¿por qué justo ahora?
-Porque somos menos... Antes vivian mas Cazadores que dudaban y hubo mas humanos que se animaron a hacerles frente. Y no olvidemos que eran 3 y no 2 los Principes Demonios- explica DK- Yo soy el unico Neutro que permanece en el mundo...
-Creen que porque somos menos nos pueden ganar...- murmura Adela.

Ian y Uriel se mantienen al margen. Ellos antes fueron Ángeles y saben que, dado los miembros del consejo, toda la cuestion del complot es mas que factible.
Macu e Irene se miran en silencio y como si pudieran transmitirse pensamientos, asienten y giran a la par hacia DK.
-¿Cuántos somos? ¿Cuántos crees que están disponibles para hacer frente y luchar?- Macu habla con tono serio aunque en sus ojos brilla la sed de pelea y sangre.
-Debemos recuperar a Elian, eso sin duda, pero también hacerle frente al consejo...- agrega Irene.
El Imparcial suspira y sonríe a medias.
-Soy Neutro, pero siempre he pensado que parte de mi trabajo consiste también en ayudar a que las fuerzas del mundo logren un equilibrio. Debo admitir que las acciones del consejo no son buen ejemplo para el resto de nosotros... Y no llegamos a ser dos decenas los que estamos bajo la lupa del consejo.
Las gemelas se estremecen, al ver los pocos que pueden luchar. No pueden ganar así...

Macu e Irene saben que irán a la batalla sea como sea y que lo darán todo por obtener la victoria.
-Pero hay Ángeles y Cazadores que nos ayudarán sí explicamos la situación- indica Ian nervioso- No podemos permitir que el consejo gane.
Narim asienten pensativo y agrega:
-Supongo que ya se han dado cuenta de que yo jugaré a su lado... Y Sharem limitará las fuerzas si sabe que Karol estará en el campo de batalla. No nos haremos buenos ni mucho menos, pero tenemos más posibilidades de triunfar luchando codo a codo con ustedes...
Uriel sonríe. Sabe que Narim se guarda las verdaderas razones, pero agradece que ayude.
Irene sospecha también, pero sabe que nada puede hacer. Aylen es grande y es dueña de tomar sus propias decisiones.

-Bien... Yo me encargaré de buscar refuerzos. Ni bien regresen Karol y Aylen, ustedes deberán separarse y buscar a Sharem y Elian. Algo me dice que falta poco para la batalla...- explica el Imparcial.

Mientras tanto, Karol ha intentado que Aylen acepte escuchar a su madre.
Luego de varios minutos discutiendo, Aylen acepta darle una oportunidad a Irene.
Regresan a la carrera a la casa de DK. El grupo extraño y heterogéneo que las espera parece agotado luego de tanta discusión.
Irene aprieta fuerte la mano de Macu, aguardando la reacción de su hija.
Antes de que nada suceda, Narim se acerca a Aylen y desliza dos dedos por la frente de la Cazador.
Macu se tensa, sabiendo lo que sucederá.

Aylen siente que el suelo bajo sus pies desaparece.
Un torbellino de imágenes la envuelve y maneja a su antojo.
Un hombre luchando contra un Demonio, el grito de Macu al verlo morir entre sus brazos, el llanto de Irene y la sangre de los Ángeles que su madre y tía asesinan.
La realidad la golpea fuerte cuando Narim se aleja de ella.
El Príncipe Demonio dirige su mirada al resto del grupo y murmura:
-La única muerte que pesa en mi conciencia es la de Joaquín. Ni él ni Sharem me permitieron interceder. El Cazador luchó por cuidar a su familia y si colaboro ahora es para redimir mi error de no haber detenido aquella pelea...

Irene y Macu sonríen con tristeza.
Aylen duda ante su familia y amigos y prefiere guardar silencio.
-Debemos continuar la búsqueda- señala Macu- El tiempo apremia.
-Si Uriel me ayuda, podemos encontrar la posición exacta de Sharem- Narim se encoge de hombros.
-Seguramente intentará escapar, deberemos rodear el lugar...- aventura Ade.
-Sí. Él tendrá un buen ejército custodiando la zona, pero nuestras fuerzas bastan. Los Demonios más fuertes estarán cerca de Elián, para cuidarle la espalda a Sharem- agrega Ian.
Sólo Irene repara en Aylen, que nada opina y se muestra aún conmovida por lo que Narim le ha mostrado.
-Debemos salir de aquí para valernos de nuestros poderes- propone Uriel.
-Nos veremos pronto. Que el bien los acompañe- saluda DK y todos parten al fin.

Aylen aún busca la mejor manera para hablar con su madre y explicarle lo que siente mientras el resto del grupo va planificando los siguientes pasos de la búsqueda.
Queda mucho por recorrer...