Reseña: Undercover: Ángeles encubiertos, de Mariana Calderón.

Título: Undercover, Ángeles encubiertos
Autor: Mariana Calderón:
Número de páginas: 362
Editorial: Tríada Ediciones

Sinopsis: Alexandra Bell lleva una vida común y corriente, donde reparte el tiempo entre sus estudios y su trabajo sirviendo pintas tras la barra en el Brentwood Arms, el pub de su padre. Como la mayoría de nosotros, Alex ni siquiera sospecha que los demonios se esconden entre la gente, toman su forma y hacen de Londres su territorio de caza. Tras la horrenda masacre en el Madame Jojo’s, perpetrada por seres infernales –y de la que Alex apenas salió viva-, se enterará que los enigmáticos Red y Sébastien, habituales clientes del pub, forman parte de los Undercover, cazadores de élite pertenecientes al legado artúrico cuya misión es luchar contra el caos y la oscuridad demoniaca. Y no son los únicos. Entre secretos, exorcismos y hechizos, Alex tendrá que enfrentarse a sus peores pesadillas mientras intenta salvar la vida de sus seres queridos, y a sí misma, antes de que sea demasiado tarde.

Pocas veces me sucede que me animo a leer historias nuevas antes de que nadie más lo haga. Pocas veces ocurre que me siento dentro de una película nada más comenzar a leer. 

Y acá tenemos un ejemplo claro de que, las probabilidades pueden completar y lograr que todo suceda a la vez.

En este libro, la escritora mexicana Mariana Calderón nos muestra una realidad, su realidad, valiéndose de una pluma ágil y para nada aburrida.

En un Londres que parece de lo más común y corriente, Alexandra vive entre la Universidad y el pub de su padre, donde trabaja cada noche, con los temores típicos de toda adolescente, pero lejos de caer en el papel de doncella torpe e incapaz de valerse por sí misma. Ella es una bocanada de aire fresco en la historia y agradezco lo realista de su papel.

Será por culpa de su empleo que su vida se verá modificada rotundamente. Y es que en el pub la clientela resulta de lo más variopinta y, sin dar a conocer su secreto, el grupo de una organización acostumbra a pasar por allí y son siempre atendidos por nuestra protagonista. Uno de ellos, Red, resultará cautivador y sorprendente ya desde el primer capítulo. ¿Quién no se enamoraría de un pelirrojo fortachón y carilindo? Aunque luego llegarán otros que podrán conquistarnos si se lo permitimos.

Alex no sabe quiénes son ellos. Nada conoce sobre la vida oculta que llevan, del trabajo que realidad a fin de cuidar a la humanidad. 

Dedicados a eliminar monstruos y alimañas de todo tipo y tamaño, los Undercover Angels viven una vida plagada de fantasías que resultan creíbles y realistas. Entrenan cumpliendo rigurosas pruebas y se convierten en eximios guerreros, sabiendo que el resto de la humanidad nada sabrá de su existencia.

En algún momento, el mundo de Alexandra y el de los Undercovers se cruzan. Porque las leyendas más inverosímiles, los cuentos que solo parecen cuentos, a veces pueden cumplirse, incluso para una organización de luchadores ocultos. 

Cuando el mal vaya tras Alex, cuando el peligro se eleve sobre ella y la aparte de todos y todo, solo podrá salvarse con la ayuda de esos guerreros de los que nadie sabe y deberá confiar en ellos, lo quiera o no.

Una historia detallada con cuidado, sin caer en el pecado de aburrir al lector con sus explicaciones exageradas, con una realidad tan palpable que logra convencerte de ese mundo y con personajes muy bien logrados que evolucionan y nos muestran diferentes rostros a medida que avanza el relato.

Pude sentirme allí, pude verme como Alexandra, pude temer a lo oscuro, pensando que nadie iría a socorrerme y rogando por un milagro.

Para saborear hasta el último instante: Sébastien y su particular modo de ver las cosas y actuar en medida a ello. Parece frío, distante, típico guerrero experto, pero guarda mucho en su interior y, si Red no te compró el corazón, él lo hará seguramente.

Con un villano notable, un desarrollo adecuado y un final alucinante, Undercovers me dejó con ganas de más. No por la falta de páginas o detalles en el argumento, sino porque la historia me hizo amar a los personajes y me costó dejarlos ir al llegar a la última página del libro.

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Si no leyeron el libro, denla la oportunidad.
Lo merece.
Nos leemos pronto!